Voy a escribir algo tan
siniestro, que cuando pronuncies cada palabra tus labios tiemblen junto a ellas
y un escalofrío recorra tu cuerpo removiendo cada poro de tu alma. Voy a
escribir algo tan macabro, que cuando recuerdes en la noche aquella frase
dedicada no puedas cerrar los ojos y una bestia te coma por dentro, desgarrando
tus entrañas y haciendo que la sangre emponzoñe tu mirada, desbordando dolor,
angustia, rabia, venganza… que veas pasar el tiempo, desgastando tu piel, tu
vida. Que veas morir a tus personas más cercanas y queridas sin que puedas hacer nada
para impedirlo. Que tus gritos no se oigan en el más absoluto silencio y la
gente no se percate de tu existencia. Escribiré frases tan dolorosas que el
aire que respires se encenderá en tus pulmones y arderá reduciendo a cenizas
ese corazón tuyo movido por el orgullo y la mentira. Ese corazón tuyo que acabará enterrado
en el más lejano de los olvidos, donde nadie pueda oirlo palpitar. Voy a escribir algo tan tenebroso que cuando
vayas a dormir y te tapes con las sábanas sientas a tu lado mi respiración en
la almohada y el aroma que te embriague sea el del azufre del infierno,
esperando a darte la bienvenida. El aire se irá agotando y tu garganta se
cerrará rodeada por una cuerda invisible que te dejará agonizando mientras
lágrimas de terror descienden acariciándote la cara…y esas lágrimas…justo en
ellas, se verá reflejada mi sonrisa y el brillo de mis ojos alegrándose de
verte caer. Observando la triste despedida entre tu cuerpo, alma y la vida.