Tomó un
tiempo de descanso
entre líneas
sin palabras con caricias sin amor.
Las
noches le entregaban el calor por sentimiento
mientras
la luna le guiñaba un ojo desde el colchón.
Porque
no encontraba labios que encajaran con su alma
ni esas
manos que abrazaran a su amiga soledad,
decidió
vender palabras cargadas de falsa ternura
a cambio
de amor con fecha de caducidad.
Sábanas
de hielo seco,
Café,
leche y un adiós.
¿Qué
menos que un desayuno
Para un
polvo del montón?
Un
viajero sin destino,
mercader
de los placeres,
domador
de la locura,
poeta de
champán y hoteles.
Amante
de desamores
y amado
por lo prohibido.
Lo
bello que en él quedaba
fue perdiéndose en el olvido.
Y así
sigue su camino, regando las flores tristes
con lágrimas
enjuagadas en noches de falsas hadas,
falsa magia.
Susurros disimulados vacíos de significado.
Sin besos
que van al alma,
entre luchas
de almohadas.
Pues
todo lo que él ofrece sólo es amor por un día.
Unas
horas de mentiras que saben a poesía.
A licores
de lujuria mezclados en el colchón,
dejando
sólo el recuerdo de su tacto sin amor.
*-*
ResponderEliminarComo me suena
ResponderEliminarTardas en publicar pero vale la pena la espera
He de admitir que llevaba unos meses de sequía en cuánto a inspiración se trata, pero parece que justo en el momento que más centrado debería estar, viene a dar guerra de nuevo!
Eliminar¿Deseas que te amen?
ResponderEliminar¿Deseas que te amen? No pierdas, pues,
El rumbo de tu corazón.
Sólo aquello que eres has de ser
Y aquello que no eres, no.
Así, en el mundo, tu modo sutil,
Tu gracia, tu bellísimo ser,
Serán objeto de elogio sin fin
Y el amor... un sencillo deber.
PTG. Edgar Allan Poe